Jueves 21 de Noviembre de 2024 - 14:38:37

Hirió a otros cuatro niños. Ocurrió en la ciudad de Blumenau, al sur del país. El autor se entregó tras el ataque.

Bomberos y agentes de seguridad atienden un ataque con arma blanca en la entrada de la guardería Cantinho Bom Pastor, en Blumenau, Brasil. Foto EFE

Un hombre que ingresó a una guardería con un hacha mató a cuatro niños e hirió al menos a otros cuatro el miércoles en el sur de Brasil, informaron las autoridades. Las víctimas tendrían entre cinco y siete años, según medios locales.

El gobernador del estado de Santa Catarina, Jorginho Mello, confirmó los asesinatos en la ciudad de Blumenau en su cuenta de Twitter y escribió que el asesino fue arrestado. Los bomberos confirmaron que el hombre atacó con un hacha y que tres niños fueron trasladados al hospital.

"Un individuo entró en la escuela con un arma blanca y mató a cuatro niños. Hubo también cuatro heridos", explicó esta fuente.

Al menos cuatro niños murieron en un ataque con arma blanca en una guardería en Brasil. Foto EFE

El autor del ataque, un hombre de 25 años, se entregó en una sede de la Policía Militar, donde fue detenido, informó la fuerza en un comunicado.

La policía confirmó las cuatro muertes y otros chicos trasladados a hospitales de la ciudad para ser asistidos. Según el diario Folha de San Pablo, las víctimas fueron tres niños y una niña, todos de entre cinco y siete años.

La misma fuente indica que el agresor llegó en una moto, saltó un muro y eligió a sus víctimas al azar. Cuando vio a los profesores que corrieron para proteger a los chicos, el asesino volvió a saltar el muro y escapó. Más tarde se entregó a la policía.

Las autoridades informaron que al momento de entregarse el agresor se mantuvo en silencio. Aún se desconoce el móvil de semejante crimen, afirmaron.

En el lugar, de acuerdo a medios locales, el clima fue de desesperación. Los familiares de los chicos que asisten a la institución fueron llegando al enterarse del ataque, sin saber qué había pasado con los pequeños.

Las víctimas tienen entre cinco y siete años. Foto EFE

Inicialmente, solo los agentes de seguridad ingresaron al sitio para rescatar a las víctimas, y los sobrevivientes fueron liberados gradualmente. La agresión fue cerca de las 9 de la mañana local y alrededor de una hora después todos los niños ya habían sido sacados de la guardería y estaban junto a sus familias.

Los cuatro heridos, de acuerdo a la información oficial, son dos niñas de 5 años, un niño también de 5 y otro de 3. Un quinto niño sufrió heridas leves y fue trasladado por su propia madre el hospital, pero fue dado de alto rápidamente.

Por el momento, se desconoce el estado de salud de los otros heridos, aunque la prensa local señala que hay al menos un niño con un cuadro clínico grave.

Además de funcionar como centro de día y preescolar, la institución donde se produjo el ataque ofrece otras actividades educativas para los alumnos de escuelas públicas que asisten a contraturno.

El presidente Luiz Inácio Lula da Silva condenó "la monstruosidad" ocurrida: "No hay dolor mayor que el de una familia que pierde a sus hijos o nietos, aún más en un acto de violencia contra niños inocentes e indefensos", escribió en un mensaje en Twitter.
Un horror que se repite en Brasil
Los ataques en escuelas se incrementaron en los últimos años en Brasil.

El más reciente fue el 27 de marzo último: un adolescente de 13 años mató con un cuchillo a una profesora en una escuela en Sao Paulo.

En noviembre pasado, un adolescente de 16 años mató a tiros a cuatro personas e hirió a más de una decena en dos ataques en escuelas en la ciudad de Aracruz, en el estado de Espirito Santo (sureste).

En 2019, dos antiguos estudiantes mataron con un arma de fuego a ocho personas en una escuela de secundaria en Suzano, a las afueras de Sao Paulo, y después se suicidaron.

El ataque más mortal registrado en Brasil se produjo en 2011: 12 niños murieron cuando un hombre abrió fuego en su antigua escuela infantil en Realengo, un suburbio en Rio de Janeiro, antes de quitarse la vida.

Fuente: clarin.com